Por Félix Sautié Mederos
Crónicas cubanas
Los espacios para ejercer un diálogo de todos con todos constituyen ámbitos de importancia estratégica para el futuro de la Nación Cubana, dadas las circunstancias que estamos viviendo adentro y afuera de nuestras fronteras. Pienso que en la actualidad es imprescindible como nunca antes reconocernos y respetarnos unos a otros, ya que lo que está en juego es mucho más que la prevalencia de las personas que opinen a partir de una u otra concepción política e ideológica, así como de un sistema específico e incluso de las ideas, conceptos y principios que le dan fundamento y de las discrepancias de quienes no están de acuerdo con lo establecido. En mi criterio lo que nos jugamos los cubanos de hoy es mucho más que todo eso, es la subsistencia nada menos que de la mismísima identidad nacional y de la Patria en su conjunto, porque de nuevo estamos ante sutiles amenazas y peligros en los que la falta de un diálogo entre todos podría horadar las bases esenciales de la Nación que nos legaron nuestros ancestros. No exagero, soy un cubano que ha vivido muy adentro del país desde mi nacimiento en 1938 a la fecha. En este período de vida terrenal he estado presente en los avatares e improntas en que la historia nos ha envuelto; y desde lo más íntimo del pueblo comparto sus sentimientos y angustias que en la actualidad algunos tratan de manipular para que no se conozcan públicamente. En este orden de pensamiento, esos espacios de diálogo a que me refiero, considero que son como los pulmones de una sociedad que lentamente se ahoga en medio de consignas altisonantes y cada vez más vacías, junto con rencores y desencuentros que podrían dar al traste con toda nuestra historia nacional.
También debo decir que considero muy importantes estos espacios cuando posibilitan pensar y opinar con criterio propio más allá de los conceptos apologéticos acuñados que algunos tratan de imponernos. Con estas características de potenciar el pensamiento no han surgido muchos espacios de encuentro y de diálogo, porque tienen que afrontar descalificaciones y censuras extraordinarias. En estas circunstancias han logrado subsistir muy pocos y los que lo han alcanzado deben ser preservados y apoyados con especial atención, incluso en mi criterio más allá de las discrepancias que puedan plantearse al respecto de su origen, contenido y funcionamiento. La Revista católica Espacio Laical con esfuerzos, transparencia y persistencia lo logró en un principio, hasta que lamentablemente un desencuentro y un sismo que no debía haberse producido, los detuvieron. Sobre este asunto escribí en su momento una crónica en la que expresé mis criterios al respecto (1). Yo y uso el yo teresiano que me caracteriza (2) he seguido en detalles a Espacio Laical desde su fundación a la fecha; y por eso me regocija lo que les voy a testimoniar en esta crónica, relacionado con la reanudación de sus sesiones abiertas de debates hace algunos días.
Escribo pues sobre el encuentro realizado con el tema El empoderamiento de sectores desfavorecidos en Cuba: los afrodescendientes en el que se plantearon consideraciones esenciales al respecto del tema en cuestión por parte de un panel de reconocidos especialistas que dieron base al debate convocado con asistencia libre. Los objetivos específicos que se plantearon los ponentes en cuestión, en mi criterio tienen que ver con las esencias mismas de nuestra identidad nacional mestiza, tales como: Situación económica y social de los afrodescendientes en Cuba; Acciones realizadas hasta ahora para mejorar la situación económica y social de los afrodescendientes en Cuba. Marco legal e institucional. Eficacia; Otras posibles acciones de empoderamiento. Debo decir que los planteamientos iniciales de los ponentes y los aspectos de énfasis que señalo, no limitaron para nada la expresión de los participantes en este debate que fue abierta y totalmente libre, como debe ser.
Considero que el encuentro convocado por Espacio Laical en esta ocasión, abordó un tema de crucial importancia no resuelto, como es el real empoderamiento de los afrodescendientes cubanos que constituyen un tronco básico de nuestra identidad nacional mestiza y caribeña, fraguada como un ajiaco (3) al decir de Don Fernando Ortiz; porque no basta con leyes que por demás no se cumplen, lo que es necesario realizar para alcanzarlo son acciones concretas de múltiples objetivos comenzando por el ámbito de los conceptos discriminativos que han prevalecido durante mucho tiempo así como por poner en práctica efectivas medidas en los aspectos económicos y sociales que sean realmente significativas para el empoderamiento de los sectores más desfavorecidos como son los afrodescendientes. Lo primero que debería plantearse es reconocer que realmente en la práctica existe la discriminación y no continuar con los conceptos oficialistas que la han convertido en un verdadero tabú hasta el presente. En lo personal debo decir que me impresionó sensiblemente el testimonio tan directo y sentido expresado por los intelectuales cubanos negros presentes: Víctor Fowler, Tato Quiñones y muy especialmente Roberto Zurbano, sin desdorar a los demás que participaron, porque en mi opinión ellos hablaron con el sentimiento de quienes por su color han vivido intensamente las inconsecuencias de una discriminación contraproducente con nuestros orígenes que ha persistido en el tiempo y que es una vergüenza que tenemos que asumir y tratar de resolver entre todos los cubanos, sin que nadie en particular se considere exento de estas obligaciones esenciales con nuestra identidad nacional y con nuestra historia. También estuvo presente, y no puedo obviar, la tenaz luchadora Gisela Arandia, quien es un ejemplo de consecuencia en estas luchas, por ser una mujer negra que no se cansa de luchar en favor de un verdadero empoderamiento de negros y mestizos en Cuba, fundamentalmente del pueblo de a pie.
Tampoco puedo olvidar la enjundiosa e ilustrada intervención de la profesora Mayra Espina sobre el tema, así como la del antropólogo Antonio Martínez, quien intervino en nombre del Grupo Aponte, y la eficaz conducción de Rodrigo Espina, quien actuó como Conductor y facilitador del amplio debate suscitado. Además hubo algunos anuncios iniciales por parte de la dirección de Espacio Laical, planteados por su Editor y Jefe de Redacción Jorge Domingo Cuadriello en los inicios del debate, que los considero especialmente muy importantes al respecto de los propósitos de la Revista de continuar con estos debates abiertos cada 3 meses convocados con temas de significativa importancia para nuestra sociedad así como de publicar completamente las intervenciones de todos los participantes tal y como se hacía cada vez que se realizaban anteriormente. ¡Albricias, de nuevo con Espacio Laical! Así lo expreso y así lo pienso sin desestimar para nada el desprendimiento de lo que se ha denominado Cuba Posible surgido dentro del concepto Casa Cuba desarrollado en los ámbitos de Espacio Laical como inspiración del inolvidable Monseñor Carlos Manuel de Céspedes, quien se encuentra junto al Padre Celestial en la Casa que no se Acaba. Lo planteo además con mis respetos por la opinión diferente y sin querer ofender a nadie en particular. fsmederos@gmail.com
(1) Ver en Por Esto!, Un desencuentro público que nunca debió manifestarse, publicado el domingo 15 de junio 2014,
http://www.poresto.net/ver_nota.php?zona=yucatan&idSeccion=22&idTitulo=332207
(2) Mi uso del yo teresiano lo he asumido en la práctica con reiteración. Especialmente expresé mis fundamentos y razones al respecto en una crónica publicada en el periódico en El Puerto Información de Andalucía, España con fecha 31 de mayo del 2004, en la que me opongo al tan extendido uso del nos mayestático detrás del cual en mi opinión se esconden identidades y cobardías que ocultan el pensamiento propio en contraposición del yo afirmativo usado en sus escritos por la Doctora Angélica, Santa Teresa de Jesús que según el crítico español don Martín Alonso, nos permite apreciar la virtud propia de las confesiones sinceras y el amor inflamado de las comunicaciones divinas.
Ver Unicornio, suplemento dominical de Por Esto!, ensayo Casa Cuba, domingo 8 de febrero 2015.
http://www.poresto.net/ver_nota.php?zona=yucatan&idSeccion=24&idTitulo=381531
(3) Ajiaco, caldo tradicional típico en Cuba y otros países de Latinoamérica confeccionado con muchos productos del agro y de origen animal todos mezclados.
Publicado en Por Esto!, el miércoles 18 de marzo 2015.
http://www.poresto.net/ver_nota.php?zona=yucatan&idSeccion=22&idTitulo=389465